Siguiendo con estas reseñas, hice una segunda segunda lectura (no sé, se me hace graciosa la frase repetitiva) a esta novela de Inés Garland, "una historia de amores imposibles y sueños que se pierden en las turbias aguas del río", como dice la contratapa.
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| Inés Garland, imagen de Carla Cardarelli (la solapa del libro tiene esta misma foto, en blanco y negro) |
De la infancia a la adolescencia de la narradora y protagonista Alma (con un epílogo en su vida adulta), esta es una historia sobre crecer, dejar atrás eso que son la infancia y la inocencia. Una novela juvenil es el término que yo usaría para definirla; no se la daría a leer a un niño, y un adulto mayor tendría una mirada distinta a la que he podido rescatar.
La novela transcurre en un momento tristemente recordado en la historia argentina: la última dictadura militar. Recuerdo pensar, la primera vez que la leí, que la dictadura bien podría ser un género en la literatura argentina, así como prácticamente lo son la Segunda Guerra Mundial o la de Vietnam en el cine estadounidense. Precisamente haber vivido en carne propia esta época es lo que pienso daría a alguien mayor otra mirada a la novela. Tal vez a la primera vea sutilezas que yo solo noté tomando notas al leer por segunda vez.
Otro tema de la novela son las diferencias sociales y económicas, las distintas realidades entre unos y otros personajes. No profundiza en un aspecto que haga una explicación aburrida, sino que es algo siempre presente en la historia. Es un contexto, un telón de fondo, una realidad.
Se describe a las novelas de amor como "literatura rosa", y se llama "negro" al policial que muestra una violencia muy explícita...con esto en mente, diría que este libro es rosa con manchas negras, o rosa oscuro por lo menos.
Dentro de la historia se mencionan otras obras, cuya importancia en la trama deja entrever su contenido. A modo de "recomendación", las rescato de mis notas para enumerarlas:
La novela transcurre en un momento tristemente recordado en la historia argentina: la última dictadura militar. Recuerdo pensar, la primera vez que la leí, que la dictadura bien podría ser un género en la literatura argentina, así como prácticamente lo son la Segunda Guerra Mundial o la de Vietnam en el cine estadounidense. Precisamente haber vivido en carne propia esta época es lo que pienso daría a alguien mayor otra mirada a la novela. Tal vez a la primera vea sutilezas que yo solo noté tomando notas al leer por segunda vez.
Otro tema de la novela son las diferencias sociales y económicas, las distintas realidades entre unos y otros personajes. No profundiza en un aspecto que haga una explicación aburrida, sino que es algo siempre presente en la historia. Es un contexto, un telón de fondo, una realidad.
Se describe a las novelas de amor como "literatura rosa", y se llama "negro" al policial que muestra una violencia muy explícita...con esto en mente, diría que este libro es rosa con manchas negras, o rosa oscuro por lo menos.
Dentro de la historia se mencionan otras obras, cuya importancia en la trama deja entrever su contenido. A modo de "recomendación", las rescato de mis notas para enumerarlas:
- El poema "Las manos", de Miguel Hernández.
- Sin especificar la obra, cita un fragmento y un autor:"Yo amo en ti lo imposible/Pero de ningún modo la desesperanza. Nazim Hikmet"
- Como influencias para un personaje se mencionan a Lorca (junto con los autores ariba mencionados) y a los músicos Spinetta, Charlie García, Violeta Parra y Los Olimareños.
- Contrastando con los músicos anteriores, para mostrar la diferencia entre las realidades de los personajes, también se nombra a James Taylor, Crosby Stills Nash & Young, América y David Gates.
- La novela "Abraxas", de Herman Hesse, es fuente de argumentos en una discusión.
- Aparece "Las odas elementales", libro aparentemente prohibido en la época y por ello quemado en la novela.
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| "Para Joaquín, que se aguantó mi voladura" Sucedió que en la feria yo compré el libro antes de que llegara Inés a la hora programada...y a la hora programada Inés no llegó. Cada tanto volvía al stand preguntando si ya había llegado, y cuando finalmente lo hizo estaba con ella la editora, a quien yo había preguntado más temprano. Ella comentó que yo había estado pendiente de su llegada para la firma, y ésa es la historia detrás de la dedicatoria. |
